La lámpara Drop Chandelier es como una escultura viviente que se adapta a su entorno y crea una expresión elegante y artística. Inspirada en la iluminación modernista de los años 50, une pasado y presente en un diseño orgánico con 14 brazos flexibles que se pueden ajustar en innumerables direcciones. Las pantallas curvas proporcionan una luz vibrante que transforma el ambiente de la habitación. La lámpara está disponible en acabado oxidado crudo, así como en latón, bronce, negro quemado y blanco, todos cepillados a mano para una expresión refinada. Drop Chandelier es más que una lámpara: es innovación atemporal y diseño artístico. Diseñada por Kristian Sofus Hansen y Tommy Hyldahl.
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